jueves, 29 de septiembre de 2011

Algún día...

Hoy os traigo una campaña que me ha encantado. Ha conseguido conectar conmigo como hasta ahora ninguna, o muy pocas campañas, de juegos de azar habían conectado. Normalmente, estas campañas acuden a tópicos e incluso los exageran para poder así conectar de una manera más cómica u honírica.

Sin embargo, esta campaña brilla por su "cercanía". Por supuesto, toca el tema de los sueños, eso es básico, pero la manera en que lo hace consigue que te veas reflejado. Para poder verla haz click aquí

¿Quién no se ha dicho alguna vez "algún día"? Me encanta... Pues bien, parece ser que para unos pocos afortunados ese día puede ser el 11.11.11.

Por otra parte, esta última campaña de la ONCE me ha parecido un espectacular ejercicio de previsión, a dos meses de tan importante fecha.

¿Qué te parece?

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Jugando con los datos

El otro día estaba tranquilamente viendo la tele y vi el último spot de Don Limpio (me gustaba mucho más lo de Mr. Propper, pero en fin...). La pieza viene a decir que Don Limpio ya no sólo limpia, sino que limpia dos veces más y eso al final es ahorro... Hasta aquí bien. Pero si uno se pone a leer la letra pequeña, esa que aparece en el 90% de los spots, la cosa cambia: Vs marcas blancas en superficies verticales de cerámica sin diluir (échale peguitas).



Dicen que los publicistas tenemos mala fama con los números, que los interpretamos como queremos y que al final nos aprovechamos de ellos... Dudo que sea para tanto, pero tengo que reconocer que, a veces, me da vergüenza ver ejemplos como estos, porque sinceramente me parece un engaño. Es como si los de Dacia, con todos mis respetos, en su próximo spot dijeran que su coche tiene el doble de velocidad punta, y en letra pequeña: Vs coches koreanos sin tres ruedas y subiendo una pendiente del 20%

Personalmente, creo que siempre es necesario buscar la manera de hacer los datos, los números, más atractivos, pero eso es una cosa y otra, muy diferente, es maquillarlos y hacer que parezcan lo que no son.

¿Qué te parece?

jueves, 1 de septiembre de 2011

Hablando el mismo lenguaje

Alguna que otra vez he hablado sobre el naming, y lo importante que es tanto para la marca como para el cliente o consumidor.

Un naming erróneo puede desprestigiar una marca, puede desposicionar un producto o puede ser como una broma de mal gusto (me viene a la cabeza el Audi Q3).

El arte del naming, porque es tanto una ciencia como un arte, consiste en encontrar el equilibrio entre los valores de marca, los de la submarca, y el atractivo para el consumidor y, por supuesto, para el comprador/prescriptor (o como queramos llamarlo). Tender únicamente hacia uno de estos puntos puede comportar un serio fracaso.

A principios de semana, descubrí un naming que, sinceramente, me llamó la atención: me pareció divertido, e incluso me estuve riendo un buen rato; pero pasado un rato me di cuenta de que como posible prescriptor o comprador me echa bastante hacia atrás... Con todos ustedes la CACHOBARRA
 

¿Qué te parece?

Por cierto, wellcome back a todo@s